A Anelie le sorprende la facilidad que tienen algunas cosas para desaparecer...
Gastas gran parte de tu tiempo en conseguirlas y cuando menos te lo esperas desaparecen en solo un soplo, y se van volando...vuelan lejos y no vuelven. Vuelan alto.
Y se mezclan con todo y se convierten en nada. Por mucho que para ti hayan sido.
A Anelie le encanta soplar suavemente los Dientes de León, pero piensa que es un placer demasiado corto...