miércoles, 14 de octubre de 2009

Mariposas...



A Anelie le encanta salir a pasear por el pueblecito en el que veranea.
En esos paseos ella sola, con ayuda de su imaginación, cree ser protagonista de grandes aventuras...

A Anelie le encantan las mariposas de colores y el polvillo brillante que se le queda en los dedos al cogerlas. (Siempre ha pensado firmemente que gracias a ese polvo de colores existen las sombras de ojos...)




No siempre es fácil atraparlas con los dedos, dice Anelie... por eso, en muchas de sus aventuras va acompañada de su cazamariposas que también utiliza para coger renacuajos y objetos raros de las charcas.




A Anelie le encanta pararse mil veces con cualquier cosa en el camino por absurda que sea.



Y finalmente, después de su largo y caluroso paseo, a la pequeña Anelie le encanta sentarse en el machadero de las casas viejas para notar el fresquito de la piedra en sus piernas.