Desde siempre, Anelie vive sumergida en una obsesión por el tiempo.
Todo el mundo le advierte a Anelie que si se pasa media vida soñando y dándole importancia a sus experiencias lúcidas, tendrá menos tiempo para vivir como una persona normal. Pero ella nunca fue una persona de esas...
Cada persona tiene su vida, su tiempo. Si tu lo prefieres puedes vivir amarrado a un reloj, o no amarrarte a ninguno.
Anelie decidió vivir en función de mil relojes diferentes, en función de los demás, corriendo de un lado a otro para llegar a tiempo de la felicidad de cada uno.
No es que ella no sepa vivir a su manera, sino que la felicidad de los que la rodean le marcan su ritmo, su tiempo...
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